CENTRO DE ACOGIDA AL PEREGRINO, CAPILLA
Y ALMACÉN
La pronunciada pendiente del solar y la limitación
en un fondo máximo de 10m. según el Plan General de Ordenación Urbana vigente,
han condicionado en parte el diseño del edificio, que se genera como un gran
contenedor donde se va desarrollando el programa de necesidades sustentado por
la idea de conferir a la planta un aspecto libre, de fácil control y
mantenimiento.
El
programa cuenta con tres usos que aunque interrelacionados requieren espacios
específicos para su desarrollo, sobre todo el referente a almacén de pasos que
por sus dimensiones y capacidad se ha desconectado en parte del resto, pudiendo
incluso, llegar a funcionar de forma autónoma, ya que cuenta con su propio
acceso desde la calle.
Los
otros dos usos, el de capilla y albergue, aunque distintos, si buscan una
constante conexión entre ellos, aunque siempre guardando la intimidad que cada
uno requiere.
De
esta forma se crea un espacio abierto a la calle pero dentro del propio
edificio, al que llamaremos zaguán, como acceso al mismo y que a su vez
organiza el paso a las diversas estancias, no solo en planta baja, sino también
y debido a su doble altura, en planta primera, generándose todo alrededor del
mismo. Así, en planta baja, además de un control vinculado a una
oficina-archivo general, se accederá a la enfermería, sacristía, cuarto de
reuniones y estar del peregrino, aseos, lavaderos exteriores, duchas y un área
destinada a dormitorio, aunque este uso se desarrolla preferentemente en la
planta primera, Pero sobre todo está el acceso a la capilla de cuya presencia
solo sabemos por lo que se intuye a través del muro perforado que la separa del
zaguán.
La
capilla estructuralmente independiente será el único volumen capaz de romper el
contenedor por dos de sus lados, la fachada posterior y la cubierta, y a lo
largo de su perímetro se desarrollarán tanto las circulaciones verticales como
horizontales creándose continuamente una sensación dentro-fuera.
Es
de resaltar la importancia del patio trasero para el edificio y su
funcionamiento interno. Este patio robado a la orografía del terreno, se
configurará de forma irregular como éste, abriéndose en algunos sitios para dar
cabida a los lavaderos y cerrándose en otros hasta entrar en el propio
edificio. Además dará el acceso al jardín escalonado superior, mediante
escaleras y rampas, que incluso conectarán con el nivel de la planta primera en
algún punto.
Quedaría
por describir el uso de una franja del bajocubierta destinada a lavandería y
almacén vinculado al mantenimiento del albergue.